Supervisión y trabajo en equipo para una atención de calidad
La supervisión de casos es una de las herramientas de trabajo que utilizamos en el servicio psicosocial, junto al resto de servicios del programa Hiranka, en aras a incrementar las buenas prácticas y la calidad del trabajo con las personas usuarias.
La supervisión se basa, por un lado, en elementos teóricos que encuadran las diferentes problemáticas que afectan a las personas usuarias y, por otro, en la riqueza de enfoques de un equipo multidisciplinar compuesto por integradoras, educadoras, trabajadoras sociales y psicólogas.
Ante cada nueva necesidad, realizamos un análisis de las características específicas del caso, reflexionando sobre todas las dimensiones de su situación socio personal y teniendo en cuenta las diferentes visiones de las y los profesionales que participamos en el trabajo de supervisión. A partir de aquí, se consensuan líneas comunes de intervención teniendo en cuenta todas las dimensiones de la intervención: psicológica-terapéutica, educativa, seguimiento social y apoyo en gestiones administrativas.
Esta metodología multiplica la capacidad de observación, ya que tiene en cuenta los diferentes roles que el equipo desempeña en su relación con las personas. Se recogen todas las aportaciones: las de psicólogas/os, educadoras/es, trabajadoras sociales y las de las/os integradoras/es que acompañan a las personas en horario nocturno.
El trabajo de supervisión de casos requiere de una coordinación constante entre profesionales de todos los equipos que integran el programa Hiranka. Esta coordinación es una de las claves de nuestro trabajo y se materializa en las reuniones semanales conjuntas para abordar los diferentes casos y en la permanente comunicación entre los equipos.
